Fuente: www.laprovincia.es

Catalogada como uno de los enclaves más importantes de Europa para la práctica del buceo, La Restinga ve con preocupación la erupción volcánica en el mar de Las Calmas, una amenaza a su principal motor económico. "El buceo debe convivir con el magma", asegura Francisco Armas Montero, presidente de la Asociación de Centros de Buceo de La Restinga.

¿En qué situación se encuentra ahora el sector del buceo en La Restinga?

Pues la mayoría de las reservas se han cancelado, casi todas hasta diciembre. Mientras, los pocos que han querido venir están saliendo desde los centros que se han desplazado e instalado en el muelle de La Estaca. El problemas está en que allí no existe una infraestructura para ello por lo que si esto continua tenemos el compromiso del Cabildo para preparar un espacio donde podamos trabajar.

¿Sería una posible vía de escape, porque no es lo mismo una zona que otra?

Bueno, aquella zona también es buena lo que pasa es que no está definida para el buceo y el mar muchas veces no lo permite como si hace en la zona de Las Calmas. Entonces el buceo estaría muy limitado y por supuesto el sector se resentiría aún más.

¿Cómo viven el paso de los días, las distintas noticias y la evolución del magma?

Pues con la manos atadas y con una gran incertidumbre. No sabemos si sale ya o no, para ver qué podemos hacer nosotros.

¿Qué les han dicho los científicos?

Pues que todavía es pronto. Se barajan muchas hipótesis por lo que ahora todo son especulaciones. Supuestamente, el vertido de azufre y el perímetro afectado bajo la superficie no es tan grave en la orilla como para desgastar los fondos que nosotros solemos visitar.

¿Ante esta situación y el nivel de alerta, ustedes piensan seguir saliendo a bucear?

Sí. Nuestra zona de buceo, como le digo está próxima a la orilla. Aquí solo con salir 50 metros hay una profundidad inmensa. Por eso creemos que podríamos seguir trabajando en La Restinga, pero todo depende de lo que digan los técnicos.

¿Cuando fue la última vez que visitó el fondo marino de La Restinga?

Pues, precisamente fue el martes pasado, antes de la evacuación. Llevé a un grupo de biólogos que realizaban un estudio en la reserva integral. Cuando llegamos a tierra vimos un revuelo grandísimo. De inmediato nos comunicaron la evacuación y tuvimos que irnos.

¿Vio algo fuera de lo normal en esa inmersión?

Nada. Se estaba realizando un listado de peces y un estudio del fondo y lo vimos todo muy normal. Los biólogos ni se creían la de variedades de peces que pudimos ver ese día. Cuando empezaron los temblores, unas semana antes, los sentimos también bajo el agua, sobre todo a través de un ruido potente y continuado, como de rocas. Nosotros nos quedamos mirando unos a otros asustados, pero los peces no mostraron ninguna reacción. En esa inmersión notamos tres temblores.

¿Sí le ofrecen la posibilidad de regresar al pueblo de La Restinga qué hará?

Si lo permiten las autoridades dormiré allí. Tenemos que atender el centro y un restaurante. Hemos perdido mucho dinero y tanto los seguros como los impuestos hay que pagarlos. Yo tengo unos hijos en la universidad y si no pago la residencia los echan a la calle. Algo tendremos que hacer.

¿Entiende el miedo de muchos vecinos por volver?

Sí. La gente esta nerviosa y teniendo un sitio más seguro donde quedarse me parece bien. Por el día es otra cosa. Que hagan vida normal y por la noche que suban a dormir tranquilos. Yo no tengo ningún miedo. Estamos prevenidos y dejaremos los coches listos para salir en cuanto nos avisen.

¿Para cuándo tendría usted clientes si abre su centro de buceo?

Tengo una gente, que viene todos los años a El Hierro, que vendrá el domingo y que me han dicho que si se puede, quieren salir.

¿Hay que aprender a vivir con el volcán?

Esa es la cuestión. Lo cierto es que no sabemos realmente cuánto tiempo puede tardar en salir a la superficie si es que sale. Se verá si hay una mayor presencia de burbujas y calor, pero hasta que esto termine tendremos que convivir con ello.

¿Qué les pediría usted a las autoridades?

Pues que nos faciliten las cosas, que no nos limiten y nos impidan trabajar, siempre, claro está, dentro de las medidas de seguridad oportunas. En las zonas de peligro no queremos entrar pero en las otras, dentro de las posibilidades que haya, que nos permitan ejercer nuestra profesión.

¿Puede acabarse el buceo en La Restinga?

No, no parará. Ni puede ni debe, es más, creo que incluso irá a más. No le veo ningún motivo para que pare.

¿Han tomado alguna medida en común?

Pues lo primero es que hemos creado una plataforma de damnificados para que los empresarios puedan gestionar las ayudas que tengan que solicitar por sus pérdidas. No solo para los empresarios del buceo, sino de la hostelería, la pesca; para todo el mundo. Para muchos, con tantas pérdidas y en una época tan complicada, va a ser difícil salir a flote. Ahora íbamos a celebrar el Fotosub, nuestro principal atractivo. Hemos estado preparados para el Open, con todo los gastos que esto conlleva y de donde se beneficia mucha gente de La Restinga. Ahora, todo son pérdidas.