La Secretaría General del Mar del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino ha asumido las tareas de control e inspección en el área marina protegida del "Cachucho", en Asturias, una vez entrado en vigor el reglamento comunitario por el que se establecen las normas en el ámbito pesquero relativas a la protección de este área marina.

El área marina protegida del "Cachucho" es una extensa zona a una distancia de 24 millas náuticas de Asturias, en la que se ha establecido una zona de protección mediante un acuerdo del Consejo de Ministros que, posteriormente, se remitió a la Comisión Europea para su tramitación y aplicación en unas aguas que, en el ámbito pesquero, son competencia de la Unión Europea.

En el último Consejo de Ministros de Pesca de la UE, celebrado en diciembre de 2008, se creó, pues, a iniciativa de España el "Área Marina Protegida del Cachucho", que prohíbe la utilización de determinados artes de pesca como el arrastre de fondo y las artes de enmalle.

El pasado 4 de febrero, los medios aéreos de la inspección pesquera de la Secretaría General del Mar identificaron dos buques pesqueros con puertos base en Asturias y Cantabria con artes prohibidas de enmalle de fondo caladas.

A la vista de estas presuntas infracciones, la Secretaría General del Mar ha abierto los expedientes administrativos correspondientes que, eventualmente, determinarán o no la existencia de una infracción a la normativa de pesca vigente en este área protegida.

La creación de un Área Marina Protegida conlleva un proceso de consultas a los sectores implicados, mediante los cuales se elabora un plan de usos respetuoso con los ecosistemas marinos que se deben proteger y con una actividad pesquera sostenible en la zona. La tramitación legal de estas zonas pretende, pues, proteger los intereses generales, tanto pesqueros como medioambientales.

Siendo el "Cahucho" la primera de las zonas protegidas bajo la figura de "área marina protegida", de acuerdo con la Ley de Protección del Patrimonio Natural y la Biodiversidad, la Secretaría General del Mar considera a todas luces necesario un escrupuloso respeto a las normas vigentes por parte de todos los sectores económicos y sociales implicados en la misma.

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