En la desembocadura del río Tordera, en Tossa de Mar (Girona) se ha iniciado la instalación de un arrecife artificial para la protección y recuperación de fondos con biocenosis dentrítica de maërl, y la protección de ecosistemas coralígenos. La iniciativa ha partido de la Secretaría General de Pesca Marítima, que protegerá así 1.169 hectáreas de entre 20 y 45 metros de profundidad. Colaboran en el proyecto las cofradías de Blanes, Lloret de Mar t Tossa de Mar.

<ATRAS