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TURISMO
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TEXTO
Y FOTOS: Oficina de Turismo de Denia |
Reposadas
transparencias de un mar antiguo |
Águilas,
situada en el extremo sur de Murcia, está bañada por
el Mediterráneo a lo largo de 28 km de hermosas playas. |
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En
un entorno único, visitado desde la antigüedad
por las culturas clásicas del Mediterráneo,
con pecios fenicios, griegos y romanos, se extiende una
costa recortada que comienza al poniente con la magnífica
playa de la Carolina. Recorre acantilados cortados a pico
donde anidan los halcones peregrinos, como en la Isla
del Fraile o Cabo Cope, y termina con las solitarias playas
de levante que se extienden desde la Fuente de Cope hasta
la Galera. El clima mediterráneo, con unas precipitaciones
casi inexistentes, más propias de latitudes mucho
más bajas, 3.200 horas de sol al año y una
temperatura media de 25º C, hacen que la vegetación
se asemeje a la del vecino litoral norteafricano, caso
de la comicabra, el ado o azufaifo, endemismos como Halocnemum
Strobilaceum, y una fauna con algunas especies, comunes
también al vecino continente, como la tortuga o
la huidiza gineta. La humedad es casi inexistente y se
concentra en barrancos y ramblas por los que muy raramente
corre agua y que son aprovechados a modo de oasis por
la vegetación de mayor porte: balardes, higueras,
palmeras y algarrobos.
Pero lo realmente singular del litoral aguileño
son sus aguas. Trasparentes, con una temperatura media
de 20º C y la máxima calificación medioambiental,
las convierte en únicas para la práctica
de los deportes náuticos. El buceo se puede practicar
en enclaves singulares por la variedad y riqueza de especies,
como La Catedral, La isla del Fraile, Piedra del Covacho,
y otros.
También
disfrutaremos con el avistamiento de cetáceos como
los delfines o los calderones desde las propias embarcacione.
Desde el actual puerto de Águilas, como punto de
partida, se abre ante nosotros una enorme región
submarina desde el peñón de la Cueva de
Lobos hasta Punta Parda. Al abrigo de majestuosos acantilados
y bellas playas, podemos encontrar puntos de buceo sin
miedo a que el mal tiempo nos juegue una mala pasada.
La propia configuración de la costa, junto con
la protección de los riscos y montañas de
la sierra del Cantar, hace que sea posible bucear todo
el año. Los temidos vientos del Levante y del Norte
tienen el paso vedado. El Poniente a duras penas llega
y tan sólo el Lebeche afecta a estas aguas, pero
siempre podremos encontrar un lugar resguardado. Esta
es una de las características de esta costa.
Los que practican deportes acuáticos como el buceo
saben que el ejercicio físico y el aire puro del
mar abren el apetito. La gastronomía en Águilas
es de una tradición ancestral, muy variada, con
un gran contraste de sabores que gira en torno a los productos
del mar y de la huerta. Los platos suelen estar muy condimentados,
notándose en casi todos ellos la influencia de
la cocina árabe, especialmente en los postres.
Como producto estrella destacamos el salmonete, la gamba,
el tomate y la alcaparra. Mención aparte merece
la elaboración de embutidos típicos de la
zona como la morcilla de cebolla, la salchicha o la longaniza.
Además de todo esto, Águilas cuenta con
fiestas singulares como el Carnaval, declarado de Interés
Turístico Nacional, en el que participa toda la
población derrochando humor, imaginación
y alegría. También son de interés
algunos monumentos como el Castillo de San Juan de las
Águilas, la Torre de Cope o la de Las Palomas,
la Fortaleza de Tebar y Chuecos, etc. |
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