A 25 Km de la costa de Tanzania (África Oriental) y a 130 de su capital, Dar es Salaam, se encuentra escondido un tesoro, un lugar donde todavía es posible soñar: la isla de Mafia, cuyos fondos todavía esconden espectáculos increíbles, con una riqueza inimaginable de peces, tanto de paso como estacionarios. Y si en el agua podemos “pasear” entre meros gigantes, tortugas, tiburones y mantas, en tierra podemos encontrar los zorros voladores de las Comores.
Los resorts que nos hospedarán (el Pole Pole y el Mafia Lodge) se encuentran en una encantadora bahía, la bahía de Chole, bañada por unas maravillosas aguas cristalinas que nos invitan a visitar sus fondos. La bahía de Chole, los bosques que la rodean y las islas cercanas, están protegidas por el Parque Marino de la isla y asistidas por la WWF. Se trata de una de las zonas más grandes protegidas en el océano Índico. Ha sido reconocida como un centro de bio-diversidad en el este de África, no sólo por su barrera coralina, la abundancia de peces, tortugas y otro sinfín de especies marinas, sino también por sus mangrovias y su vegetación externa.

El buceo en Mafia
Las aguas de Mafia están protegidas por una vasta barrera coralina. La principal zona para bucear se encuentra en el lado sureste de la isla, en la bahía de Chole, un lugar que, debido a las continuas mareas, ofrece un ambiente excelente y completamente salvo de los efectos devastadores de “El Niño”, que en 1998 causó la muerte de millones de colonias coralinas en todos los océanos tropicales. Pero aquí los corales gozan de una estupenda salud y la vida marina es muy abundante. Desde octubre hasta marzo también se puede bucear en los espectaculares arrecifes exteriores, que se asoman hacia el océano abierto, donde hay un continuo pasaje de peces pelágicos y donde cualquier encuentro es posible.

Snorkeling con el tiburón ballena
Mafia se encuentra en medio de la ruta de migración de una de las criaturas más grandes y pacíficas del planeta, el tiburón ballena. Estas plácidas bestias pasan regularmente entre Mozambique y las costas de Djbouti, normalmente entre diciembre y febrero, a lo largo del canal que separa la tierra firme de la costa occidental de la isla, pero a menudo deciden pasear y descansar en el lado oriental e incluso llegan a entrar dentro de la bahía de Chole. En la cara oeste de la isla, en las aguas que bañan Kilindoni, se encuentran desde hace algún tiempo ejemplares jóvenes de tiburón ballena de forma estacionaria y por ello el encuentro con ellos está prácticamente garantizado. Se trata de un espectáculo increíble. Antes de iniciar la fantástica excursión, los dive master del lugar nos darán a conocer una serie de reglas muy importantes para poder nadar con los tiburones ballena, sin causarles ningún tipo de daño y para poder nadar junto a ellos sin que se alejen demasiado. Una vez en la barca inicia la búsqueda… localizado el ejemplar o ejemplares, la barca apaga los motores y todos esperamos que estos grandes animales se acerquen hasta nosotros. Cuando esto ocurre, nos lanzamos al agua, con máscara, tubo y aletas y máquina fotográfica. Nadar junto a esta criatura es una experiencia única. Ejemplares de unos seis o siete metros que nadan con total calma y tranquilidad, y que nos permiten nadar junto a ellos, observándolos desde muy cerca, tanto, que si no fuera porque está totalmente prohibido, podríamos incluso acariciarlos. Pasamos la mañana en compañía de estos maravillosos animales.

Meros gigantes y paseos en ngalawa
Pero también nos ha sorprendido mucho el buceo, sobre todo la gran cantidad de peces que habitan estas aguas, así como su gran dimensión, los ejemplares son mucho mayores que los de las mismas especies en otros lugares. Sin embargo, los fondos de Mafia también son capaces de saciar a los amantes del macro y de todas las criaturas raras y minúsculas, como nudibranquios, gambitas limpiadoras, gobios, peces hoja, etc.
Kinasi Pinacle es, sin duda alguna, la inmersión top dentro de la bahía de Chole. Se trata de una especie de torreón rocoso, cortado en dos por una profunda grieta vertical que, desde un fondo de 25 metros de profundidad, asciende hasta 10 metros de la superficie. Durante la fase de marea baja, cuando se reúne una gran cantidad de peces pequeños, podemos disfrutar de un espectáculo maravilloso y sorprendente. Protegidos por el pináculo, se agrupan ejemplares de meros gigantes, los más grandes que hayamos visto jamás. Se trata de meros patata (Epinephelus tukula) y meros gigantes (Epinephelus lanceolatus), que nos observan atentamente, sin moverse ni un milímetro cuando pasamos cerca de ellos. De hecho, los meros son los protagonistas de esta inmersión, ya sea por tamaño o por abundancia. Estos meros rodean el torreón cuando hay baja marea pero cuando ésta es alta, en cambio, pasean a lo largo de las paredes del Kinasi Pass. ¡Estas bestias pueden llegar a pesar 400Kg y medir 270cm! No es por casualidad que esta especie se considere la más grande entre todos los peces óseos que habitan en la barrera coralina.
Además de los meros, este punto de inmersión es espectacular por la gran abundancia de peces, tanto pelágicos como estacionarios: encontramos bancos de carángidos, barracudas, king fish, grandes napoleones, pero también nubes de fusileros, grupos gigantescos de labios dulces, peces murciélago y el pez cobia, un pez que difícilmente se encuentra en otros lugares y que, a primera vista, puede confundirse con un tiburón punta blanca. En el fondo observamos enormes rayas y pastinacas y con muchísima suerte podemos también encontrar el tiburón zambeze (Carcharinus leucas), una especie que se considera una de las más peligrosas para el hombre.
Todas las inmersiones merecen la pena, la gran cantidad de peces que hospedan las aguas de Mafia asombra siempre que nos sumergimos en ellas, cualquier punto o rincón que observamos está vivo, es un ir y venir continuo de peces de todas las especies, es un mundo maravilloso y lleno de vida, un lugar capaz de hacernos soñar siempre que lo visitamos.
Fuera de la bahía de Chole, encontramos otro fantástico punto de inmersión, llamado Jina Reef, una grieta que desciende hasta 21 metros de profundidad, con una gran variedad de corales duros, madréporas y corales blandos. Encontramos muchos meros malabar, tiburones punta blanca, tiburones guitarra, enormes rayas, águilas de mar, tortugas, carángidos y muchísimos peces de arrecife. Tampoco faltan los pelágicos y con un poco de suerte se pueden ver mantas y tiburones ballena.
Bucear en Mafia es una experiencia única, un concepto diferente de vivir el buceo, en consonancia con la forma de vivir del lugar, con tranquilidad, con mucha calma, poco a poco, o como dicen ellos en swahili (el idioma local) “pole pole”. Un ejemplo de ello son los maravillosos “paseos” en las ngalawa, las barcas de madera, a vela, típicas del lugar, que nos acompañarán hasta los puntos de inmersión y al regreso, si el viento lo permite, nos darán un paseo hasta la playa del resort con la vela izada, empujados por el viento, escuchando tan solo el ruido del agua cortada por el lento avanzar de la barca.