Todo este lamentable episodio de la historia ha dado pie a que en la actualidad Truk sea la Meca del buceo en barcos hundidos, ya que la mayoría de estos pecios han permanecido intactos, casi igual que esa mañana de 1944, convirtiéndose en autenticas cápsulas en el tiempo, en donde el fino sedimento que cubre los restos son el único indicativo del paso de los años.
La primera ocasión en que un buceador se sumerge en las aguas de la laguna interior del atolón y penetra en alguno de los pecios se siente transportado en el tiempo, todo está tal como quedo tras el bombardeo del 44, como si fuera un lugar inexplorado. Se siente una sensación muy especial contemplando los objetos personales de los marineros, el diario de alguno de los oficiales, multitud de material bélico e incluso los restos de alguno de los desafortunados que perecieron en la batalla. Por otro lado el coral ha ido colonizando la estructura de los barcos, desde los cañones hasta el más pequeño objeto de cubierta, produciendo una combinación multicolor que contrastaba con todo lo demás.
La flota fantasma
De entre el enorme “catálogo” de pecios que se pueden bucear, algunos merecen una mención especial, bien sea por la gran cantidad de vida, por la gran cantidad de artefactos que encierran o por las posibilidades que ofrecen para su exploración interior:
- Fujikawa: de 134m. de eslora, pese a no ser el más grande, resulta el más espectacular. Reposa sobre su quilla en un fondo de 40 metros y sus bodegas están llenas de munición, ametralladoras, mascaras anti-gas, cientos de botellas de sake y un sin fin de objetos, a cual más curioso. Pero el auténtico tesoro está en su interior, ya que explorar las 4 cubiertas de su sala de máquinas es algo increíble y muy técnico.
- Río de Janeiro: trasatlántico rearmado de 142m. En su exterior se puede contemplar cañones, cientos de botellas, diferente material bélico y muchos corales, pero tras explorar parte de sus 7 cubiertas descubrirás de todo, desde cerámica china, repuestos para los submarinos, enseres personales, restos humanos y mil cosas más. Por supuesto dedicando una inmersión aparte a la impactante sala de máquinas.
- Nippo: de 107m., es uno de los que ofrecen un puente de mando en mejor estado, en especial el puesto del timón y el telégrafo de máquinas. Junto a decenas de enseres personales de la marinería y oficiales, se pueden ver buen número de munición de artillería, un tanque, minas antipersonal y cañones anticarro. Por supuesto junto a todo esto miles de corales colonizan cada rincón del exterior del casco, mástiles y cañones.
- San Francisco: por su profundidad – de 45 a 60m. – es una inmersión más “tek”, con agua muy clara, algo más fría y con menos corales, pero no por ello deja de ser atractiva, sino todo lo contrario. En la primera bodega se ven hileras de minas junto a munición y cajas para esta. En la segunda bodega contemplaras los camiones, algunos de ellos en bastante buen estado y en la parte posterior de la cubierta de proa, los tanques; los de estribor están amontonados y más deteriorados, pero el tanque del costado de babor está perfecto, sin duda alguna uno de los mejor conservados de Truk.
- Shinkoku: con 180m. es el mayor pecio de la zona. La gran cantidad de corales blandos dan un colorido incomparable a las inmersiones, pero su interior es lo mejor, ya que explorando sus laberínticos pasillos encontraras talleres, camarotes, una sala de máquinas increíble, la enfermería (donde reposaban los restos de algunos marineros), el puente, etc.
Pero la lista de pecios que puedes visitar durante un viaje común es muy larga y todos ellos interesantísimos: Futmizuki, Gosei, Heian, Kansho, Kiyozumi, Sankisan, Unkai, Yamaguiri… Todos ellos hacen que las visitas a Truk sean algo inolvidable, haciéndonos sentir que hemos estado en la "Meca" de los barcos hundidos.
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A tener en cuenta:
Buceo: 5 inmersiones diarias.
Temporada: la mejor época para visitar Truk es de Noviembre a Mayo, periodo de menos lluvia, aguas más claras y de vientos casi nulos. Temperatura del agua 28/29º C y temperatura exterior 26/35º C .
Documentación: pasaporte en regla. No se requiere visado.
Moneda: el dólar USA.
Idioma: la lengua oficial es el inglés.
Electricidad: 110 voltios, enchufe plano.
Sanidad: no se requiere ningún tipo de vacunación, solamente precaución de no tomar agua embotellada ni hielos.
Como ir: se puede optar por dos rutas diferentes. La asiática, más corta, volando desde España a Manila o Tokio, para luego continuar a Guam y Chuuk. La americana, algo más larga, volando a Los Ángeles, Honolulu, Guam y Chuuk. Una tercera opción también puede ser volando por Palau, en caso de querer bucear de paso en este extraordinario destino, para continuar hasta Guam y Chuuk.
Extensiones: las cuevas excavadas por los japoneses, en donde aún quedan algunos restos de la guerra, y el antiguo cuartel general nipón son las visitas que ofrece la isla (ciertamente poco interesantes). Mucho más recomendado, ya estando en la zona, es un salto a Yap o Palau. |