Una de las preguntas básicas que se nos plantea a todos es si durante el proceso podremos continuar haciendo nuestra vida normal y sobretodo ahora, en los meses de verano, si podremos exponernos al sol. En el submarinismo, como en otras múltiples actividades al aire libre, los largos periodos al sol, están asegurados durante la travesía en barco, la espera en superficie o inclusive una vez ya sumergidos.

La fotodepilación, como se conoce a este sistema médico para la eliminación del vello de manera rápida y duradera, requiere el uso de luz que puede ser de 2 tipos: de láser o luz pulsada.

En ambos casos, la técnica consiste en la aplicación de una intensa luz sobre la zona deseada. La superficie abarcada en cada destello es de 1cm x 3cm aproximadamente. La melanina, pigmento responsable del color de nuestra piel y pelo, absorbe esta luz en forma de calor, y este aumento de temperatura se transmite directamente a los folículos pilosos eliminándolos e impidiendo su nueva aparición.

Se requiere repetir el proceso un número de veces en función del tamaño de la zona a depilar, aunque lo más frecuente es que oscile entre las cuatro y cinco veces. Las sesiones se realizan cada dos meses si el área a depilar es corporal o cada mes si el área es facial. El tiempo total de tratamiento es variable en función del área a depilar pero por ejemplo, el labio superior requiere un año para su desaparición. En este punto hay que aclarar que siempre, al finalizar el tratamiento completo queda entre un 3 y un 5% del vello inicial.

La repetición de las sesiones es necesaria porque la técnica sólo es efectiva si el vello se encuentra en la fase de crecimiento, fase que representa el 50% de la vida media de un bello.
Es necesario que la persona que se somete a un tratamiento de fotodepilación no presente la piel bronceada, porque un exceso de melanina podría suponer riesgos y daños para la piel.

Durante el periodo del tratamiento también se deben cumplir una serie de normas importantes:
* No se puede decolorar ni depilar la zona donde se lleva a cabo el tratamiento, aunque por el contrario, sí están permitidas técnicas de rasuración con cuchilla o crema depilatoria, que no modifican el color del vello ni lo arrancan de raíz.
* No se puede tomar el sol de una manera directa por los inconvenientes de un aumento de melanina en la región a tratar.
* Es importante el uso de protección solar muy elevada para prevenir las exposiciones diarias de forma indirecta.
La técnica es más efectiva en función de la calidad y el color del vello a eliminar; por tanto, cuánto más grueso y más oscuro más rápido es el proceso.

Una vez aclarada la cuestión técnica del proceso aconsejamos, por tanto, a nuestros buceadores que el mejor momento para su realización es el otoño, donde nuestro contacto con el sol ya empieza a disminuir. En el caso de que la época de buceo esté a la vuelta de la esquina y nos encontremos en pleno tratamiento, la única recomendación que podemos dar es un buen toldo donde guarecermos y mucha protección solar.

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ASESORAMIENTO:
INSTITUTO MÉDICO DE NUTRICIÓN, CIRUGÍA Y ESTÉTICA de Madrid