FOTOS: EQUIPO COUSTEAU

ENTREVISTA
Bernard Delemotte y Claude Wesly / Miembros del equipo del Calipso acudieron a San Sebastián para presidir un homenaje al comandante Cousteau
El desove del coral es un espectáculo fabuloso
Aprovechando la visita de Delemotte y Wesly a San Sebastiánpara la inauguración de la plaza que se encuentra sobre el Aquarium y que lleva el nombre de “Comandante Cousteau”, así como a la celebración de la XXV edición del Ciclo Internacional de Cine de esta ciudad, BUCEO XXI realizó una entrevista a estas leyendas vivas del buceo, los cuales aprovecharon para enviar un saludo a todos nuestros lectores en nombre del equipo Cousteau.
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¿Qué les llevó a decidir llevar una vida de aventura, investigación, etc.?
Bernard Delemotte: No son cosas que se deciden, las cosas llegan, y yo descubrí el mar a los siete años. Mi padre, que estuvo prisionero durante muchos años en Alemania, me llevó a ver unos amigos de cuando él estuvo en cautividad que se encontraban junto al mar, en la escuela me decían que el mar era un montón de agua, pero al bajar del tren y ver un pedazo de mar entre dos edificios me quedé fascinado, una revelación ...y al acercarme me dije que tenía que descubrir que había debajo.

¿No es fustrante que después de tanto años de conservación del medio marino, siga habiendo tragedias ecológicas?
Claude Wesly: Hemos visto el mar muy bello, y en estos momentos hay una degradación visual y desaparición de muchas especies, hay que realizar reservas para que las especies puedan reproducirse, el comandante Cousteau ya habló de la degradación del planeta y de los océanos, hay que darse prisa, hay cierta polución que no se ve. Los antiguos buceadores tenemos una misión de sensibilizar a los jóvenes o a la generación futura, como decía el comandante Cousteau. El planeta está en peligro y la mar, en particular, más.

¿Cuál cree que es el legado más importante de Cousteau y su equipo?
Bernard Delemotte: Yo creo que el comandante Cousteau tenía una gran visión. El pensaba cómo motivar a la gente. Cuando la gente ama una cosa reacciona, y amar al mar nos ha hecho defenderlo. El mar es el pulmón de la tierra, y este ha sido nuestro legado.


¿Se consideran científicos o creen que en su trabajo también hay un poco de poesía?

Claude Wesly: Hay algunas misiones que han sido un poco políticas, pero hay ciertamente un lado fantástico cuando conocemos el mar y amamos el color del mar, eso si que es poesía. Pero también hemos sido profesionales, allí estabamos para trabajar, la poesía estaba dentro de cada uno.

¿Cuántos años piensan seguir al pie del cañón, qué proyectos tienen?
Bernard Delemotte: Claude está trabajando con el equipo Cousteau, es administrador de la sociedad y continua llevando el mensaje, dando conferencias, etc. Yo sigo trabajando en el equipo de Cousteau, en el equipo de cine, pero también trabajo en otras sociedades, aunque estoy muy agradecido por la vida que he llevado con el Capitán Cousteau.


¿Acabará el ser humano con la vida del mar?
Claude Wesly: El mar antes era más bello que ahora, mañana, sólo Dios sabe lo que puede pasar, pero creo que tendría que haber cambios en el hombre y en el planeta. En 30 años faltará agua en muchos sitios y no sólo en África, también en territorio europeo. El sol y el agua son la fuente de la vida y hay grandes bloques de hielo que se están deshaciendo... Hay industrias que polucionan, hay muchos Erikas en el mundo... Las personas y los políticos son los responsables ya que la vida del planeta está en sus manos.

Cómo buceadores y marinos, ¿cuál ha sido el momento y recuerdo más emocionante e intenso que han vivido?
Bernard Delemotte y Claude Wesly: Tengo muchos recuerdos. En mi vida ha estado con muchas especies, pero la que más me penetró fue cuando realizaba el descenso de una inmersión, en 1967,y se me presentó el ojo de una ballena a menos de un metro de distancia, observándome fijamente.Otro recuerdo importante fue la vida en la primera casa submarina.Con la edad que tenemos es verdad que tenemos muchos y buenos recuerdos, pero sobre todo el recuerdo a la “pastora”, la señora Simone Cousteau. Cousteau era el trabajo y la dirección, detrás de él había hombres, con voluntad, coraje, profesionales que intentábamos aportar cada uno nuestro
grano de arena. Pero en los momentos que estos hombres estaban tristes o decaídos, era la pastora, la señora Simone, la que nos levantaba el ánimo, nos consolaba y nos protegía. Ella siempre estaba allí cuando la necesitábamos y era una gran mujer.

¿Cuál es la especie marina qué más le ha sorprendido?
Bernard Delemotte En todos nuestros viajes hemos visto muchas cosas, pero la más fabulosa ha sido el desove del coral. Eso pasa durante tres días al año, con la luna, y suele ser de noche. Bajas con una pequeña linterna en la oscuridad y en un momento de la noche el coral empieza a desovar. El coral, que parece que no tiene vida, suelta millones de huevos. Es algo precioso.


¿En ocasiones se han visto en peligro?

Bernard Delemotte: La hora es la hora, la profundidad es la profundidad, y para evitar tener accidentes hay que saber qué se está haciendo. Yo me acuerdo que en una
ocasión una ballena de 50 toneladas saltó sobre el barco y cayo sobre la zodiac. Estábamos tres personas y sobrevivimos de milagro. En otra ocasión, realizando un trabajo sobre hipopótamos, tuvimos que pasar por un lago pisando cocodrilos para poder salvarnos de unos leones que teníamos al otro lado.

¿Llegará un momento en que el ser humano habite en el mar?
Claude Wesly y Bernard Delemotte: No es lo ideal para el hombre, sería como vivir en una estación espacial. Lo primero que debes hacer es quitar la polución de arriba para poder respirar abajo.En la primera casa submarina pasamos una semana. Estuvimos realizando diferentes pruebas, con salidas de inmersiones de diferentes profundidades y con mezclas diferentes, pero el problema que más se apreciaba era el frío, el corazón trabaja 25% más rápido en el agua que fuera y si se tiene frío no se puede trabajar.

 

 

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