¿Por qué crees que te atrae tanto la observación de la naturaleza?
Más que nada siento una sensación extrema de júbilo gracias a la energía vital que siento cuando estoy rodeado por la naturaleza. Cuando observo cara a cara a las preciosas criaturas de nuestro planeta no sólo hace que las entienda un poco mejor sino que mejora la comprensión de mi conexión con la naturaleza y el lugar que ocupo yo en ella. Para mi observar la naturaleza es VIVIR.

¿Y por qué esa “obsesión por el océano”?
Mi obsesión por la naturaleza y, en particular, por el océano proviene de mi niñez. hasta done alcanza mi memoria era siempre curioso con la naturaleza de mi alrededor. Durante mis primeros años de adolescencia pude tener la primera experiencia verdadera del misterioso océano en los Cayos de Florida gracias a mis maravillosos padres y padrinos. Desde aquel momento los océanos han configurado mi vida. Ya sea su misterio y esplendor o su invitación a ser explorado, con cada aventura bajo las olas del océano siento que mi obsesión se satisface tanto como aumenta.

¿Crees que tu trabajo transmite esa pasión o al menos ese interés al público? ¿Reconoces los resultados?
Yo empecé con la fotografía, en la que estuve muy poco interesado durante muchos años, porque tenía la esperanza de compartir mi amor por la naturaleza con otros y permitirles introducirlos, a través de mis ojos y mis palabras, en la belleza que había visto. Trabajar como guía de buceo en Palm Beach, Florida y las Bahamas me dio la oportunidad de compartir con otros, cada día, mi conocimiento y fascinación por la naturaleza. Observar a los buceadores que se unen a mi en mis aventuras subacuáticas diarias, cómo escuchan atentamente mis observaciones personales de la naturaleza funciona en muchos sentidos: Su fascinación eleva el nivel de excitación se sus aventuras subacuáticas y además, más importante aún, salen con un nuevo nivel de respeto hacia las criaturas de la naturaleza. Esto hace que todo mi duro trabajo merezca la pena.

¿Qué relación tienes con tu socio Fritz Hayes?
Le debo mucho a mi buen amigo Fritz. Él es, en muchos aspectos, mi maestro y siempre ha sido la voz de la razón y de la inspiración para mi. Él me ha hecho creer que mis sueños pueden ser más que sueños, y me ha empujado a alcanzarlos. Aunque ahora estamos a kilómetros de distancia y raramente tenemos la oportunidad de bucear juntos su espíritu es todavía mi compañero en cada una de mis inmersiones.

Leo una cita en vuestra página thelivingsea.com: “No heredamos la tierra de nuestros antepasados sino que la tomamos prestada de nuestros hijos” ¿Se la devolveremos íntegra?
Casi nadie cuestiona que la huella del hombre en nuestro bello planeta azul se ha expandido con enfermizos sentimientos. Hemos pescado en exceso en nuestros océanos y los espacios naturales están reduciéndose. La vida del planeta está siendo forzada al extremo. Pero en mis observaciones de la naturaleza he visto esperanza. Dale a la naturaleza una oportunidad y ella encontrará su equilibrio una vez más. El desafío, así lo siento, se basa en nuestra comprensión de que no estamos excluidos del ciclo natural sino que somos un eslabón muy importante. Ningún poder mayor que este podrá hacer posible esta transformación que la comprensión de que hemos tomado prestado el planeta de aquellos a los que más amamos: nuestros hijos.

Leo otra, esta vez de Gandhi: “La tierra nos provee todo lo que cada ser humano necesita, pero no lo que cada uno avaricia”. ¿Es esta la causa de todos los males que acechan a los océanos?
He visto demasiada bondad en la gente para pensar que el deseo de cualquiera, fuera de la avaricia, es destruir algo bello. Creo que la razón de que no se den cuenta de que produzcan tantos daños es una cuestión de falta de educación. Cuando comencé a trabajar como guía de buceo en Palm Beach solía ver a buceadores posarse, sin saberlo, encima del arrecife. Eso me forzó a cambiar la forma de presentarles mis inmersiones. Ahora me tomo el tiempo no sólo para indicar la ruta que vamos a tomar sino también las criaturas que podrán ver en los arrecifes. Les explico cómo encontrarlas, su comportamiento, e incluso añada algo de humor con a las payasadas que hace el animal. Baba Dioum dijo una vez: "al final conservaremos sólo lo que amemos; y amaremos sólo lo que entendamos; y entenderemos sólo lo que nos hayan enseñado". Con un poco de conocimiento esos buceadores entran en el agua cada día con un nivel de observación completo y les veo como ahora se preocupan por cada pequeño centímetro del océano. Espero que mis fotos y mi página web puedan servir para lo mismo a nivel mundial.

¿Crees que cada foto tuya es en realidad un “guiño” que la propia naturaleza nos da a través de tu cámara?
Espero que sí. Veo que las palabras tácitas de la naturaleza se me presentan en cada fotografía que saco, bien sea en la sonrisa de la cara de un delfín o en la tristeza que veo a veces en el ojo de un tiburón. Mi fotografía, desde su infancia, ha tenido un propósito principal que es mostrar a los demás lo que quizás no han visto; capturar uno de los muchos momentos de la esencia de la naturaleza.

¿Hay alguna foto que recuerdas más que otras por su dificultad o peligro?
Pregunta a cualquiera que esté rodeado por la naturaleza, bien sea bajo el agua o sobre ella, acerca de algún peligro presente y lo más probable es que te diga que el único peligro real son los propios errores. El océano no es peligroso, pero eso no vende titulares desgraciadamente. No puedo decir que alguna vez haya sentido algún grado de peligro mientras hacía fotografías bien a un tiburón tigre de 4 metros o un caimán de 2 metros cuando estaban a menos de 10 cm de los lentes de mi cámara. Las fotos más difíciles que recuerdo haber tomado fueron unas del pez volador deslizándose sobre el agua. Estuve esperando unas tres horas en la cubierta de un barco en medio de un precioso día en el centro de los bancos de las Bahamas tratando de capturar esa foto. La rapidez de respuesta lo era todo y después de 400 o más fotos al final pude tener una pocas dignas de presentarse. Lo que probó que la dificultad fue sin embargo excitante y divertida.

¿Cómo afrontas una jornada de trabajo bajo el agua? ¿Pesa más la planificación o la improvisación?
Como fotógrafo naturalista sólo puedes planear que los animales salvajes no vayan a respetar tus planes. De hecho podría decir que más bien harán lo contrario para reírse en secreto de tu frustración. Pero ciertamente la fotografía acarrea mucha planificación y como se suele decir: "Planeas tu disparo y disparas tu plan". Esperar pacientemente el momento oportuno y, más importante aun, conocer el tema que quieres, ayudan mucho a la hora de capturar la foto perfecta. Pero la suerte y la improvisación ciertamente son ingredientes importantes en cualquier foto de la naturaleza.

¿Qué avances técnicos echas de menos en la era de la fotografía digital?
Aquel que permita apretar el disparador y tomar la foto perfectamente expuesta bajo el agua en cualquier momento. Bueno, en serio, creo que la fotografía digital ha hecho maravillas para el mundo en el que vivimos y no hecho de menos nada. Después de todo como suele decirse: "No es el cazo; es el cocinero". Compartir imágenes se ha transformado en algo normal en nuestros días. Parece que todo el mundo tenga una galería de fotos gracias a las maravillas de la fotografía digital. Imágenes de todo el mundo están al alcance del pulso de cualquier dedo. Bastante interesante es también, y cualquier fotógrafo subacuático estará probablemente de acuerdo, que la fotografía digital subacuática me ha hecho mejor buceador. Con una cámara en mis manos comencé a perfeccionar mi técnica de buceo ya que no quería dañar aquellos animales cuyas fotos trataba de capturar. Mi buceo se hizo menos profundo ya que abajo tiendo a cubrir una pequeñísima sección del arrecife en una inmersión. Eso me ha abierto a muchas preciosas y complejas criaturas del arrecife. La fotografía digital me ha centrado más en mis inmersiones de lo que lo había hecho nunca. Además, el desafío de sacar la foto perfecta es siempre algo muy divertido.


¿A qué tipo de cliente le atrae el trabajo que hacéis?
Mi fotografía ha estado y estará siempre dirigida al público en general. No me considero un fotógrafo profesional y no trato de venderme o vender mis fotos como tal. De hecho, a parte de esta entrevista y una presentación en una bonita revista de unos amigos de España (Ocean Chronicles -Diciembre 2006-) me he expuesto poco.

¿Cómo promocionáis mejor vuestro trabajo: a través de Internet, en exposiciones, con las publicaciones…?
Promuevo mi web como un conjunto, no sólo la fotografía sino también los artículos, entre las personas que conozco personalmente. Cualquier otro interés viene casi completamente de buscadores de Internet. Como diseñador profesional de páginas web (mi trabajo anterior) he trabajado duro para que thelivingsea.com aparezca en las primeras páginas de los buscadores más populares de Internet. Todavía tengo que hacer una exposición o que me publiquen más...

¿Qué proyectos estás preparando?
Hace un año mi interés en el mundo casi microscópico del plancton me ha llevado a sacar algunas fotos interesantes de estos diminutos pero importantísimos ciudadanos de nuestro planeta azul. Voy a exponerlas en una próxima edición trimestral de Wetpixel (www.wetpixelquarterly.com). Estoy también muy emocionado trabajando en un pequeño libro con muchas de mis imágenes y observaciones personales sobre esta asombrosa diversidad de plantas y animales.