¿Personalmente
qué es lo que más te ha entusiasmado de esta aventura?
La integración en un equipo multidisciplinar formado por
personas de distintas nacionalidades y con formación muy
heterogénea. La colaboración con organismos, universidades
e instituciones prestigiosas en el terreno de la protección
ambiental. Conocer lugares remotos y bucear en destinos no accesibles
al turismo. La navegación oceánica, las tormentas
tropicales, la selva, los encuentros con cetáceos, el firmamento
en ausencia de contaminación lumínica, las historias
de marinos durante las guardias. La convivencia y la sincera amistad
entre tripulantes.
¿Qué incidencias crees que tendrán vuestros
informes en la toma de decisiones que afectan a la conservación
de los mares?
Las organizaciones como Oceana constituyen grupos de presión
que apoyan sus propuestas en informes y proyectos como éste
que pretenden, entre otros objetivos, influir en las políticas
sectoriales para mejorar la gestión de los recursos marinos.
Frecuentemente este proceso no es inmediato pues las decisiones
que afectan a la protección de los mares suelen interesar
también a diversos grupos de presión que valoran
otros factores por encima de la sostenibilidad ambiental.
Desconocemos la incidencia a corto plazo que pueda tener este
proyecto en la toma de decisiones, pero es el modo habitual en
el que se trabaja en este sector.
¿Cuál es el aspecto más
duro de una experiencia como la del Oceana Ranger?
Sin duda, estar separado tanto tiempo de Luz, mi hembra y de Marina,
Adrián y Antela, mis cachorrillos.
¿Cómo era un día en
el Ocean Ranger?
Los miembros del equipo de imagen podemos pasar el día
con una intensa actividad subacuática sin salir apenas
del agua, o también cubriendo en tierra algun evento en
el que participa la organización. Otras veces pasamos largas
jornadas frente al ordenador minutando y, documentando el material
grabado. Durante las travesías realizamos guardias y labores
de marinería como el resto de la tripulación.
¿Vais a continuar con este tipo
de seguimiento de la salud del la vida marina?
Oceana inicia ahora una segunda etapa de trabajos con el Ranger.
En estas semanas, ha navegado hasta Córcega para documentar
la pesca con redes de deriva y en estos días se encuentra
de vuelta en aguas territoriales españolas para una nueva
campaña sobre la captura accidental de tortugas en los
palangres. ZOEA mantiene su vinculación con estas y otras
iniciativas relacionadas con la protección de los recursos
marinos.
¿Se ha llegado a un punto de inflexión
en la conservación o seguiremos la inercia destructiva
hasta el agotamiento total de los recursos
marinos?
En los paises occidentales cada vez existen más y mejores
leyes para la protección de los mares, obviamente no es
suficiente (sobretodo en los temas relacionados con el crecimiento
urbanístico litoral y la sobrepesca) pero pienso que la
tendencia es en esa dirección. Ahora es necesario que esta
corriente proteccionista alcance también países
menos desarrollados y aguas internacionales. Los datos de disminución
de riqueza y diversidad biológica en el mar son ya incostentables,
la opinión pública también está claramente
definida a favor de posturas proteccionistas. En este siglo se
corregirá la deriva hacia la explotación irracional
que se ha practicado en el siglo XX.
Desde el punto de vista de la biología
¿hay mucho por descubrir en los océanos?
Se conocen sólo los rudimentos de los procesos ecológicos
y las tramas energéticas que mantienen el equilibrio en
los ecosistemas marinos. Los ciclos biológicos de muchas
especies conocidas permanecen sin definir ni explicar. Los métodos
de explotación de las energías que gobiernan los
movimientos del agua en el océano son aun primitivos e
ineficaces. Desconocemos muchas claves de funcionamiento de los
océanos pero existen evidencias de la importancia de los
mares para garantizar la estabilidad del clima y de las poblaciones
humanas por eso es imprescindible continuar con la investigación
base, aumentando los conocimientos
oceanográficos, pesqueros y farmaceúticos, evolucionando
la ingeniería marina y otras disciplinas que mejoren nuestro
conomiento de los mares y su aprovechamiento para el bienestar
de la humanidad.
¿Acabará siendo la pesca una actividad deportiva
como la caza, y el pescado mayoritariamente lo criaremos en granjas?
La investigación pesquera se traducirá en el futuro
en un cambio de la tecnología de explotación. El
concepto de esfuerzo pesquero cambiará su formulación
ya que no tiene sentido seguir mejorando la capacidad de captura
de los barcos, sino que se tenderá a la pesca discriminatoria,
con identificación de especie, talla e incluso sexo objetivo.
Se desarollarán metodologías alimentarias asociadas
como el engorde en macrogranjas off shore. También se desarrollarán
proteinas animales mediante cadenas tróficas a partir de
fitoplancton en estaciones marinas.
Es improbable que nuestros nietos elijan el pescado en pescaderías
como las que conocemos hasta ahora.
¿Cuál es la clave para integrar
el desarrollo en el ecosistema global?
La respuesta no es mía, es un principio clásico
en gestión ambiental atribuido al físico Prigogine
que consiste en desarrollar procesos y explotaciones ambientalmente
sostenibles, socialmente justas y económicamente rentables.
Con este panorama, cómo ves el desarrollo
del buceo deportivo ¿cómo un peligro o cómo
una oportunidad?
El turismo subacuático es un recurso enormemente valioso
para regiones tropicales. Se trata de una actividad de bajo impacto,
a pesar de lo que se escucha a veces. Naturalmente es importante
diseñar explotaciones sostenibles que cumplan el principio
de gestión del que hablamos antes. El buceador es un ciudadano
en disposición ideal para convertirse en un activista de
la protección de recursos marinos, generalmente basta con
que reciba un ligero barniz de educación ambiental.
¿La biología marina se ha
popularizado gracias al buceo?
La biología marina es un área de conocimiento científico
bastísima que incluye disciplinas muy diversas. El submarinista
suele interesarse por ciertas prácticas de ictiología
descriptiva, sin embargo existen muchas otras facetas interesantes
de los organismos marinos que harían disfrutar enormemente
al observador submarino como la sistemática, la etología,
la estructura y el funcionamiento de ecosistemas, las relaciones
interespecíficas y la organografía comparada.
Nuevamente es interesante incorporar la educación ambiental
en la formación del submarinista.
¿Cuál es el sello distintivo
de ZOEA como escuela de buceo?
Nuestra escuela de buceo y biología marina constituye el
departamento docente de nuestra empresa y se beneficia de la actividad
de los otros dos departamentos: Proyectos Ambientales y Elaboración
de productos de educación ambiental en entorno marino.
Todos los alumnos que aprenden a bucear en ZOEA reciben información
concreta sobre el buceo responsable además de un material
especialmente diseñado para identificar los organismos
que van a encontrar en sus buceos. En España, ZOEA es la
única empresa del sector que mantiene un Sistema de Gestión
Ambiental según la norma ISO 14001 y el reglamento europeo
EMAS, lo que se traduce en la adopción de medidas para
disminuir los efectos ambientales negativos que produce nuestra
actividad y aumentar los positivos.